El mercado de internet no es novedad, aun cuando no hace muchos años, las ventas a través de la web eran impensables por las trabas respecto de medidas de seguridad, además de la poca confianza que inspiraba pagar por algo que ni siquiera se tiene físicamente a la vista.
Derribadas estas barreras, la gente cada día se anima más y más a realizar compras en internet así como a ofrecer sus productos y servicios. Para los que vivimos de la web, estas propuestas de negocios nos pueden llegar por medio de un proyecto propio o para terceros, y la manera de encararlos debe ser la misma: con seriedad y proyecciones reales del impacto.
Prever todas las variables a la hora de plantear un negocio en internet nos ayudará a planear contingencias y soluciones antes de tener que implementarlas, pero sobre todo nos ahorrara tiempo y dinero.
Para quienes desean vender servicios, es necesario hacerles saber que los compromisos digitales son tan importantes como los físicos, pues aunque las campañas de publicidad paga y posicionamiento son una herramienta para que las personas sepan qué tipo de servicios ofrecemos, es el resultado final y la satisfacción del cliente lo que genera nuevas visitas y contrataciones.
[ad] Medir la cantidad de producción y servicios que se pueden brindar también determina la estrategia a imponer cuando se publicita una web. De nada sirve a una persona que se dedica a construir, por ejemplo, vitrales de gran tamaño cuyo tiempo de trabajo y características artesanales son importantes, reciba 10 pedidos en una semana. Aun cuando vaya contra el sentido común, un usuario que pide por un servicio y este servicio es negado por no haber tiempo o recursos para satisfacerlo, probablemente no regrese a nuestro sitio.
Hacer una campaña de SEO muy pobre y poco agresiva también es negativa, pues los tiempos suelen ser tiranos, y una inversión que demora mucho en amortizarse es también la causa de que muchas personas no se animen a montar sus negocios online.
Los medios de pago electrónico son prácticamente indispensables, facilitados hoy por medio de líneas de crédito internacional como VISA, MASTERCARD o AMERICASN EXPRESS, además de PayPal o Google Checkout.
Ofrecer estas formas asegura que personas de cualquier país puedan adquirir nuestros productos, aunque también se debe considerar los costos de mantener un servicio de este tipo, pues se aplican reducciones a las ganancias propias de cada financiera.
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